Aquí, en Perú, las distancias son grandes;
dista Urubamba de Arequipa unos 500 Km y su trayecto no se hace antes de 6:30
horas. Tenemos un relieve muy accidentado.
Decidimos realizar el viaje en coche y disfrutar
del paisaje. No faltaron las lagunas y lagos; las casas de adobe aisladas y en
pequeños núcleos; los rebaños de alpacas, llamas y vicuñas; altitudes con
puertos de montaña que alcanzaban los 4.335 m de altura como el de “Abra la
Raya” y los baños termales de Aguas Calientes al borde de la carretera. Cruzamos
poblaciones importantes como Huaro, Sicuani, Santa Rosa, Ayaviri (lugar de
nuestro almuerzo), Juliaca, etc;
Aquí tienes alguna muestra de lo que mi cámara captó.
(Pulsa botón izquierdo para ampliar la imagen)
La llegada a Arequipa fue ya al
atardecer. Allí nos esperaban los Hnos. En esta ciudad hay dos colegios
de La Salle, más la Universidad La Salle.
Sí, amigo lector, como te dije, fui
a un retiro espiritual. Quizá me dirás que esto está superado ya en la actual
sociedad; que no se estila la vida religiosa interior. ¿No será que la gente trata de ignorar esa su
vida interior quizá porque no les gusta lo que encontrará en ella?. Cuando
se ignora la vida interior, hace su irrupción la violencia de una forma u otra,
ya sea como enfermedad física o mental en el individuo, o como desasosiego
colectivo.
En nuestros días, numerosos hombres y mujeres
parecen estar compitiendo por
aconsejarnos acerca de la felicidad, de la buena suerte, de conocer el futuro
y, cómo no, también para tener a Dios a su lado. Un dios a su medida y para sus
planes.
Marcos, en su Evangelio, nos da una pista preciosa
de este valor interior con dos de sus parábolas: la del tesoro en el campo y la
perla de gran valor. Tanto el granjero como el mercader vendieron todo para
hacerse con el tesoro o la perla. Ese tesoro y esa perla somos cada uno de nosotros. Es nuestro
interior, nuestra alma. Y así, Jesús, sacrificó todo cuanto era y tenía por
comprar ese tesoro y esa perla…. para comprarnos a ti y a mí.
Los que vivimos una vida
cristiana debemos profundizar, cultivar y vivir
ese valor (ese tesoro), que es nuestra vida, y que está por encima de cualquier otra
cosa. Hemos de valorar esa inmensa dignidad que tenemos a los ojos de Dios y animarnos a
poner ese tesoro al servicio de los demás. Necesitamos espacios y tiempo (días
especiales/retiro) para reflexionar sobre lo que somos y hacemos.
La ciudad de AREQUIPA
Va
por adelantado mi consejo de visitar esta hermosa ciudad. ¿Qué destacar de ella? Primero de todo aclarar por qué la llaman “la ciudad
blanca”. Esto es debido a la
piedra de sillares, blanca, resistente y porosa, de origen volcánico, empleada
en la construcción en épocas pasadas. Hoy ya no se permite la extracción de
esta piedra.
En esta época del año (verano) las montañas cercanas a la ciudad se ven
cubiertas de nieve en sus cumbres. Destaca el volcán Misty, el más próximo a la
ciudad; se trata de un volcán que está dormido pero, en ocasiones, llega a
desprender gases y humos. Su última actividad tuvo lugar en diciembre de 1985.
Alcanza una altitud de 5.852 msnm. Las cimas más altas que aparecen esta foto
alcanzan los seis mil msnm (La cumbre Ampato tiene 6288).
Varias
casonas coloniales son dignas también de visitar como la Casa Tristán del Pozo
que tiene en su fachada un rico tallado de estilo barroco (actualmente es
propiedad del Banco Continental).
RUMBO A LA CIUDAD DE PUNO
Tras la
estancia en Arequipa, emprendimos el regreso. Al llegar a Juliaca tomamos el desvío hacia La ciudad de Puno que está a orillas del lago Titicaca; es la
quinta ciudad situada a mayor altura del
mundo. Esto hace que el clima sea más bien frío y seco.
Dos son sus fuentes de ingresos: la elaboración de tejidos
con lana de alpaca y el turismo. Es la
ciudad del Perú que más turistas atrae después de Cuzco. Muchos son nacionales que
acuden en febrero al famoso concurso de
danzas organizadas en honor a la Virgen de
la Candelaria. Dicha fiesta patronal se convierte en un espectáculo único de la
riqueza cultural andina. Se trata de un sincretismo religioso en el que se une
la religiosidad del pueblo andino con la fe católica. Aquí y en otros muchos
lugares del país, las advocaciones y
festividades en honor de la Virgen María se unen al festejo a la “madre tierra”
(Pachamama).
Una vez
presentado este escenario hablaré brevemente de esta ciudad y de nuestro paso
relámpago por ella. Empecemos por su catedral que está ubicada en el centro de
la ciudad (Plaza de Armas presidida por el monumento al Coronel Francisco Bolognesi).
Se accede a la catedral por una escalinata de diez peldaños. Su construcción
data del siglo XVII y es un claro ejemplo del arte mestizo pues muestra un barroco español mezclado con elementos de la
cultura andina (figuras humanas y sirenas tocando el charango). El año 1930,
debido a un incendio en su interior, se perdieron tapices y tallas de gran
valor.
La Iglesia de
San Juan Bautista es la que en la actualidad alberga la imagen de la Virgen de la
Candelaria, patrona de la ciudad. Fue reconstruida en 1876 y es de adobe imitando al estilo ojival de
Francia. Cuenta la tradición que mientras la catedral era el recinto de los
pudientes, la de San Juan era, en sus orígenes, el recinto religioso donde
acudían los menesterosos e indígenas.
Otros
monumentos a visitar en la ciudad son: El Balcón del Conde de Lemos de estilo
colonial y tallado todo él en madera. Otro edificio del mismo estilo es la Cas
del Corregidor
Los cerros que rodean la ciudad ofrecen tres miradores naturales
desde los cuales se puede observar la ciudad de puno y el lago Titicaca: el
Cerro Huajsapata en el que se encuentra el monumento a Manco Cápac (que fue el
fundador del Imperio Inca), el mirador Puma Uta con la estatua pétrea de un
puma y el mirador Kuntur Wasi (casa del
cóndor) al que accedí por sus 620
escaleras. Preside el lugar el ave andina, realizado en metal, con una
envergadura de 11 metros.
Aquí os
presento un curioso y abundante medio de transporte para personas en esta
ciudad de Puno.
Debido a que
nuestra estancia se limitó a un día y medio, tuvimos que suprimir las visitas arqueoló-gicas del entorno y limitarnos a adentrarnos en el
lago Titicaca y visitar las islas de los
Uros.
El LAGO TITICACA:
Este lago lo
comparten los países de Perú y Bolivia y tiene una extensión aproximada de unos
8.500 km2 con una
longitud de unos 160 km por 60 de ancho
y una profundidad de 280 m. Es también el lago navegable más alto del mundo a
3.800 msnm.
(Para ampliar imá-genes pulsar botón izquierdo)
Tres idiomas se hablan en este entorno: el aimara (que es preinca), el quecha y el español.
En el lago existen dos clases de islas: las naturales
(taquille) y las flotantes o artificiales (los Uros). Estas últimas son más de
20 islas que están dentro de la bahía de
Puno; en cada una de ellas suelen
vivir de 5 a 10 familias debido a la
limitación de espacio y a las condiciones climatológicas. Sus habitantes se
auto denominan “Kotsuña” (pueblo del lago), cuya alimentación se basa en la
pesca y la caza de especies que viven y
anidan entre los juncos.
Los UROS fue el
objetivo de nuestro viaje lago adentro. En estas islas pude observar que sus
habitantes mantienen su cultura en costumbres y lengua aimara, mientras que han
perdido su mestizaje original al mezclarse con otras razas. Las mujeres nos
mostraron su habilidad en los tejidos que luego venden a un módico precio; los
hombres, son expertos en la construcción
de las balsas y el manejo de las
mismas.
Interesante
fue también la exposición que nos hicieron de cómo construyen o logran mantener a flote estas islas. Esto lo logran a
base de bloques con las raíces de las “totoras” que se entrelazan y permiten la
flotación. Sobre estos bloques de raíces entrelazados colocan varias capas de “totora”
seca y sobre esta plataforma construyen sus viviendas.
Estas islas flotantes, posteriormente, son
ancladas al fondo del lago y unidas entre sí con cuerdas que ellos mismos
elaboran con la totora. La duración de estas islas es aproximadamente de unos
22 años; pero todo de pende de la conservación y el uso al que se ven
sometidas. El mayor enemigo en este tipo de islas es que la “totora” se pudre;
por eso es habitual y obligatorio el trabajo comunal de mantenimiento.
Informaciones no oficiales y en voz baja llegaron a
mis oídos diciéndome que parte de lo visto en los Uros es un montaje. Que los
habitantes no viven allí por la noche, sino que se trasladan al amanecer y por
la tarde regresan a sus viviendas en
suelo firme. ¿Qué hay de cierto?. Sea como sea, vale la pena ver sus
habilidades en el tejido y el manejo de la “totora” para sus construcciones
flotantes y de vivienda.
VACACIONES
ÚTILES:
Así llamamos al refuerzo escolar que cinco alumnos
del pedagógico realizan cada día, de 9 a 12, con niños del entorno. Tenemos dos
niveles. Uno con niños de 6 a 8 años y otro de 9 a 12, siendo este último grupo el más numeroso. En total suman unos 50 niños. El ambiente de trabajo, juego y actividades al aire libre favorecen el clima de relación y amistad que en otros lugares y momentos del día, no encuentran.
Como veis, hasta en vacaciones no nos falta el
trabajo. Y antes de terminar este
apartado os informo a los que habéis estado ya por este rincón del planeta que,
el próximo curso escolar, volverá a tomar la dirección del Instituto el Hno.
Manuel Marín. El Hno. Javier y yo continuamos en Urubamba, reforzada la
Comunidad con un Hno. joven (Ángelo). De esto hablaremos próximamente.
¡Grácias! por la detallada descripción de sus vacaciones. Eso si que son vacaciones bien aprovechadas y con fundamento. Referente al "curioso y abundante medio de transporte" en la ciudad de Puno, en la Barceloneta también los puede encontrar en versión para turistas. ¡Felicidades por su labor! se lo dice una burgalesa en Barcelona.
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